lunes, 23 de noviembre de 2009

Agra y volver al principio

El Taj Mahal, joya de la arquitectura mongol (1654).

Mezquita Jama Masjid de Fatepur Sikri (1585), capital mongol durante 14 años.


La idea era ir este fin de semana a Varanasi (Benarés) y el siguiente a Agra, de nuevo a ver el Taj Mahal y cerrar el ciclo de mi viaje en India, volviendo al primer lugar que visité.

Sin embargo, el viernes perdimos el tren para ir a Benarés y luego me robaron el bolso durante la cena en Delhi. En fin, no sé de dónde llegó el mal karma, pero fue un día gafado. Ahora creo que ya me han robado (hurtado para hablar con propiedad policial) en todos los lugares en los que he vivido...


Al final, remediamos el cauce de los acontecimientos. Y cambiamos el itinerario. ¡El Taj Mahal, el fuerte rojo y Fatapur Sikri nos esperaban!

Como dice la Mala Rodríguez, si la vida no te sonríe hazle cosquillitas.


El sábado nos fuimos muy temprano por la mañana a Fatepur Sikri capital mongol mandada a construir por el Rey Akbar que sólo fue habitada durante 14 años debido a la escasez de agua. Hoy gracias a que se encuentra a tan solo una hora de Agra ha sido muy bien reconstruída.

Ana, Estela, Maribel, Le y yo en Fatepur Sikri en el patio Pachisi.

El patio Pachisi, donde se cree que las reinas de Akbar y sus sirvientas se reunían para jugar al "parchis", de ahí le viene el nombre.


Jama Masjid, me recuerda a un templo que sale en El Paciente Inglés.

La tumba de Sheik Salim Christhi, dónde había que cubrirse el pelo.

Después de ver atardecer sobre la arenisca roja, marchamos a Agra. Un día nebuloso añadió al conocido monumento, que Shah Jahan (en persa rey del mundo) le hizo a su esposa fallecida, algo más de misticismo. Rematamos la excursión con el Fuerte de Agra.

Leticia, en el Fuerte de Agra.

El fuerte de Agra es el más de la India. Los Grandes Mongoles: Babur, Humayun, Akbar, Jahangir, Shah Jahan y Aurangzeb vivieron y gobernaron desde aquí.

Una señora en la puerta de su casa, me recuerda a los Pueblos Blancos de Cádiz.

Todas en el Taj Mahal a las seís de la mañana. Las primeras para ver amanecer.

Me despido con una selección de los mejores saltos frente al monumento y con un macabro chiste indio, que en realidad no tiene mucha gracia:

- Cariño, ¿tu cuándo me vas a construir un monumento como el Taj Mahal?

- Cuando te mueras.

Ana, X Woman. Estela, salto del ángel.

Maribel, aprendiendo a volar.

Le, skate board sobre el Taj.

Yo, volviendo a mis orígenes.

7 comentarios:

Unknown dijo...

me encantan vuestros saltos voladoras...y qué alegría me da veros con las chaquetillas puestas... besos besos besos

Clara dijo...

no veas el frío que hace!!

Elena dijo...

buen salto, como lo haces? es de familia.

Anónimo dijo...

tres eran tres las hijas de Esteban, ja ja jaaaaaaaaa

Clara dijo...

tres eran tres las hijas de Esteban: Marta, Clara y Elena. Las tres, estas tres, también eran hijas de Manuela. :)

Maribel dijo...

Muchas gracias Clara por abrirnos las puertas de tu humilde morada, lo hemos pasado genial...ahora estamos aqui en casa de Ana en Madrid y todo se hace muy raro, uffss no hay pitos de coches joder! en fin que un besito muy grande y que disfrutes el tiempo que te queda. besitos.

Clara dijo...

Maribel!! Yo también me lo he pasado en grande con vosotras!! Nos vemos por Cádiz!! Graciaaaas por veniiiir (con música de Miliki)